Llegaba la segunda dosis de la ronda australiana, y esta empleó malas condiciones y formas mínimas para la ejecución del mejor surfing de Adur en las arenas urbanas de Manly.
La manga 10 no era sencilla con JM, Max y MSN… mediocridad y culebras para ritmos de prioridades complejas, parones, contra olas, marea alta, un Cadillac aparcado en doble fila, un canguro bebiendo té con café y la lógica se fue a echar la siesta.
A este nivel de competición la vida no es barata y si no caes de pie sales tocado. Adur ya es una clara amenaza para los competidores más veteranos y eso nos hace pensar en un futuro alentador.
Pudo haber recibido mejor suerte, no fue así. La última ola no llegó, el timing no fue y la tostada calló del lado de la mantequilla.
Hey Ho! Seguimos Adur.