Es bastante sencillo, no habría un Kelly Slater sin Tom Curren, él lo sabe y nosotros también. Larga vida al maestro de los maestros, larga vida a Tom Curren.
Es bastante sencillo, no habría un Kelly Slater sin Tom Curren, él lo sabe y nosotros también. Larga vida al maestro de los maestros, larga vida a Tom Curren.